- No hay un compromiso político por entender el fenómeno y propiciar una ley garantista sobre los derechos de las personas trans. Interesa imponer un relato sobre la transexualidad.
- El documento está lleno de imprecisiones y equívocos, y ha faltado un debate legal y jurídico serio.
- Basta con leer el preámbulo de este proyecto para darse cuenta de sus ambigüedades terminológicas y sus incoherencias técnico-jurídicas.
- El determinismo sexual que defienden tanto la ultraderecha como el feminismo TERF se basa en un esencialismo biológico y en un cientificismo desfasado.
- Un documento oficial del PSOE ha reavivado la disputa entre un sector del feminismo y el movimiento trans. Para abordarla es necesario tratar cuestiones como la identidad sexual, el género, los derechos humanos y la ciencia sexual.
- Las trabajadoras sexuales no tienen reconocidos sus derechos y la crisis de la Covid-19 y la falta de medidas para el sector las dejan aún más desprotegidas y al margen del sistema.