- Detrás del símbolo se agazapa una imagen. Y tras la imagen: otra vez el símbolo. Frege lo define así: el símbolo, que “hace presente lo ausente, lo invisible y, tal vez, lo que no se puede sentir”.
- Se escribe para la polis, por ello no puede ser oscuro ni ejercerse con autismo social; se firma con el nombre de cada uno, no anónimamente ni con pseudónimo, sino con responsabilidad social.